Conoce y aplica las ventajas de hacer las cosas al aventón

Cuando estaba en la carrera, lo más normal era que dejaras las tareas para el final. Nos pedían conceptualizar una idea, y había días que no más no me venía la inspiración.

Había veces en que no era hasta casi el día antes de la entrega, hasta que se venía la fecha límite que se me ocurría como resolver el tema, como aplicar sobre un papel, lo que habíamos aprendido en teoría y convertirlo en algo práctico.

Esto es bien común. ¿No te pasa que tienes que resolver algo y le das vueltas y vueltas en la cabeza porque no entiendes o no encuentras como lo podrías resolver? O a veces hasta se te olvida y cuando te acuerdas que ya es para mañana, te pones en friega a hacerlo y terminas rayando…

La urgencia nos hace enfocarnos.

Cuando no tienes tanto tiempo, tienes que editar, enfocarte en lo que sería lo más rápido, lo más práctico para resolver rápido y hacer algo. Lo importante se vuelve entregarlo a tiempo, hacerlo como sea, tenerlo listo.

La inspiración absoluta, es la fecha límite. -Nolan Bushnell

Aquí el tema es que puedas resolver de forma eficiente el problema aún teniendo el tiempo encima. Porque a veces terminas haciendo las cosas al aventón y no son las mejores opciones o soluciones y luego hasta tienes que repetirlas o no funcionan porque salieron, justo, al aventón.

El hacer las cosas a última hora, tiene como todo sus pros y sus contras.

Habemos quienes funcionamos mejor haciendo las cosas con tiempo.

A mi no me gustaba dejar todo para última hora, pero si me daba cuenta de que cuando me pasaba, me tardaba menos en hacer, resolver o idear una solución. Y además me enojaba mucho cuando alguien que lo había hecho una hora antes de la entrega sacaba mejor calificación que yo, no entendía por qué.

¿Qué podemos aprender de ambas experiencias? ¿Cómo podemos integrar las dos formas de hacer las cosas sacando lo mejor de ambas para que podamos tener un mejor desempeño?

Si nos hacemos conscientes de lo que pasa cuando se acerca la fecha límite y lo aplicamos a todas las veces que tenemos que resolver, sin la necesidad de tener el estrés o la urgencia como motivación, podríamos lograr más cosas sin sufrir tanto.

Me di cuenta de que cuando tienes la fecha límite encima:

1. Te distraes menos.

2. Te enfocas en la solución, no en el problema.

3. Editas, le pones tu atención y energía a cosas más factibles que a pensar en todas las posibilidades.

4. Eres más práctico.

5. Lo haces en el momento, no estas dejándolo para después.

Así que con esto en mente, ¿cómo puedes aplicarlo para hacer los pendientes con tranquilidad pero con eficiencia sin esperar al último momento?

¿Qué crees que pasé si te organizas para hacer las cosas con tiempo pero aplicando lo de la lista anterior?

Prueba y me cuentas cómo te va.