¿Cómo sobrevivir a los gastos de la temporada de fiestas?

Estamos en el inicio en México del Buen Fin y en general de la época en la que empezamos a pensar en la Navidad y con ello en los gastos de regalos, adornos para la casa, vacaciones, cenas, etc.

Hoy más que nunca es necesario tener un plan para no excedernos y llegar al inicio de año con una economía lo más sana posible. Yo se que es necesario reactivar la economía en general pero no debes perder de vista que tu situación económica es parte de la suma que arroja los resultados de cómo nos encontramos en el país.

Si vas a recibir dinero de aguinaldo, si te entra la ansiedad de gastar por que aceptémoslo, se siente rico comprar cosas a mi me encanta y también me sirve para sentir que recupero un poco de la normalidad perdida y del control que tenía antes de la pandemia y me calma momentáneamente algunas emociones que no me gustan, ten en mente que esta sensación de satisfacción de calma es momentánea y que a la larga hacer gastos sin pensarlos te puede generar más problemas y dolores de cabeza.

Con lo anterior en mente, te dejo 8 tips para enfrentarte con los gastos, los puedes aplicar siempre y hacerlos un hábito, esto te ayudará a tener siempre finanzas sanas, alcanzar tus metas y paz mental.

Cada vez que sientas la necesidad imperiosa de salir de compras hazte las siguientes preguntas:

1. ¿Porqué quiero comprar?

¿Cuál crees que sea la necesidad de comprar o gastar dinero en un momento en particular? Puede tener que ver con nuestro tu estado de ánimo o con la ilusión de sentirte mejor con la compra o con la creencia en la que asocias el pasar unas bonitas fiestas con las cosas que compras o regalas. ¿Tu necesidad es real, o es un hábito o creencia comprada de lo que te dijeron que “deberías” hacer.?

2. ¿Realmente lo necesito?

¿Lo necesitas? ¿Lo puedes pagar sin generar una deuda de meses? ¿Tienes dónde ponerlo o realmente lo vas a usar? ¿Realmente necesitas regalarle algo comprado a cada uno de los integrantes de tu familia política o a todas tus amigas del club? Recuerda que hay muchas formas de hacer sentir a otra persona especial y casi siempre las mejores no tienen nada que ver con dinero o cosas materiales.

3. Revisa tu círculo social

¿Cómo manejan tus amigos el dinero? ¿Te presionan y convencen de gastar dinero que no tienes o no tenías pensado gastar en algo? Las personas que te rodean pueden influir en tu forma de gastar dinero. Esto no quiere decir que los excluyas de tu vida, pero si tienes que ser consciente de su tendencia a gastar. Velos para un café en vez de irte de compras. Hazte consciente de lo que realmente necesitas, que no es lo mismo que necesitan ellos.

4. Nunca salgas sin una lista de compras

Prepara una lista con lo que vas a comprar antes de salir. Ya sean regalos de Navidad o la despensa. Escribir te hará reflexionar sobre lo que realmente necesitas y te ayuda a tener claras tus prioridades. Si vas a hacer gastos fuertes (electrodomésticos, autos, etc.), compara precios, pregunta por las facilidades de pago, aparta dinero para esas compras, organízate para que no te quedes sin flujo por estar pagando deudas y tengas que endeudarte más para cubrir gastos.

5. Poco dinero en la cartera y limitar las tentaciones

Evita salir con todas las tarjetas de crédito o con mucho efectivo. Lleva sólo lo que piensas gastar de acuerdo con tu presupuesto.

Has una lista de lo que puedes comprar y evita salirte del presupuesto. No te vayas todos los fines de semana a pasear al centro comercial. Organiza actividades al aire libre o en casa. No pases las horas viendo todo lo que podrías comprar en línea.

6. Deja de competir con el vecino

No quieras competir con el vecino, compañero de trabajo, amigos o familiares. La situación económica de cada uno es diferente y depende de una variedad de factores en los cuales tu valía como persona no tiene nada que ver. El estar haciendo comparaciones te lleva a endeudarte y a nunca estar satisfecho con lo que ya tienes.

Aprecia y agradece todo lo que hay en tu vida.

7. Mantén los pies en la tierra y planea, planea, planea.

Cuando las presiones o creencias de otros no te afectan, es más fácil alcanzar tus metas económicas. Planea con anticipación. Ten claras tus metas financieras, compártelas con quienes te pueden apoyar, recuerda qué es lo importante para ti y tu familia. Si tienes planeado hacer un viaje, no te gastes el dinero en cosas que no necesitas o que crees que te van a hacer quedar bien con otros. Ten claras tus prioridades.

No se trata de que no compres nada o que no te puedas dar un gusto de vez en cuando, sino de tener claro cuándo lo puedes hacer y de cuánto puede ser el gusto para que no te lleves entre las patas las cosas que realmente necesitas o que te van a generar experiencias más enriquecedoras.